Aragón - Provincia de Huesca


San Juan Bautista d'Acín de Garcipollera
(Jaca, La Jacetania)

42º 37,566'N ; 0º 27,907'O      




Acín de Garcipollera es uno de los núcleos abandonados del valle de Garcipollera. Fue abandonado entre los años 1960 y 1965, debido a la construcción del pantano de Yesa. Aunque el embalse dista mucho de este valle, se consideró imprescindible reforestar toda la zona, para evitar posibles aportaciones de tierras, producidas por las inundaciones, al pantano.


Su iglesia parroquial es el edificio que resiste con más dignidad el abandono a que ha sido sometido este valle. Sin embargo, su estado es de ruina total.


El templo era propiedad del monasterio de San Juan de la Peña, hasta en 1571 cuando pasó a depender de la diócesis de Jaca.

La torre campanario, añadida en el siglo XVII, nos ayuda a identificar el templo entre la vegetación.


La iglesia se construyó con una sola nave, de planta rectangular y rematada al este por un ábside semicircular. Este fue construido utilizando dos técnicas diferentes. Mientras que en la parte inferior vemos pequeños sillares dispuestos según el estilo lombardo, a partir de la sexta hilera encontramos sillares de mayores dimensiones y más trabajados. En la parte central se abre una pequeña ventana en forma de aspillera.


El ábside y el presbiterio se cubren con una bóveda, ligeramente apuntada, que indica que se construyeron en una época posterior al resto del cilindro absidal. Probablemente fueron construidas para sustituir a las anteriores que hundieron. Una gran grieta recorre el ábside, haciendo peligrar su estabilidad. Desgraciadamente, este valle sigue olvidado por las instituciones, que olvidan que sus piedras están llenas de historia.


También ha sufrido la misma suerte la cubierta de madera a dos aguas con que se cubría la nave y las bóvedas de las capillas adosadas.


A lo largo de los siglos ha sufrido numerosas modificaciones, especialmente en la nave, que fue reconstruida completamente en época moderna. También se construyó una segunda nave, en el muro sur, mediante grandes arcos de medio punto, apoyados en columnas, en una de las que aún se puede ver la cruz cruz de consagración.


Actualmente accedemos al templo por la capilla adosada en el muro sur, totalmente en ruinas.


Este no era el acceso, cuando el templo todavía estaba en pie, si no que se accedía por una pequeña puerta practicada en el muro oeste. También vemos otra, aunque se encuentra cegada, en el muro norte.


Precisamente la puerta del muro oeste está actualmente bloqueada por un gran bloque de piedra, que tiene vaciado su interior. Se desconoce si formaba parte de algún sepulcro o más bien era una pila bautismal o de aceites. Su ubicación nos hace pensar que era una pila bautismal.